Chris
Martin y Coldplay eran los artistas invitados en la 50ª edición de la final de
la Super Bowl. Sin embargo, la verdadera estrella de ese dia fue Beyoncé.
La cantante acaparó la atención durante la actuación del intermedio en el Estadio Levi's de Santa Clara (California, EEUU), con Bruno Mars y también Coldplay, y aprovechó la ocasión para anunciar nueva gira. Todo esto siempre con permiso de los los Broncos de Denver, ganadores del partido.
El
grupo repasó algunos de sus éxitos, como Viva la Vida, Yellow y Paradise.
Rápidamente apareció el cantante Bruno Mars para interpretar y bailar su
exitoso Uptown Funk!. A él se unió Beyoncé, que vestida de cuero negro y con el
pelo suelto, interpretó su recién estrenado Formation (lo presentó el
sábado en su canal de YouTube) liderando el baile de un ejército de mujeres
sobre el césped del estadio. La diva, que estuvo a punto de caerse en un
momento de la actuación, cantó junto a Mars Uptown Funk!.
Después
volvió Coldplay mientras un montaje de vídeo repasaba actuaciones pasadas del
descanso del Super Bowl, entre ellas las de Bruce Springsteen o Michael
Jackson. Para cerrar, Beyoncé y Mars volvieron al escenario y también Gustavo
Dudamel, director de la orquesta Filarmónica de Los Ángeles, y la orquesta
juvenil de la ciudad (YOLA). El espectáculo se cerró con fuegos artificiales,
un mosaico multicolor en las gradas y las palabras Believe in Love (Cree
en el amor).